Aquí estoy otra vez sin ti, sin el vacio de tu fría agradabilidad
en mi sociedad mecánica. ¿Cuántas veces más los sólidos en materia bruta tendré
que estrujar para mostrarte que abunda la materia en tu esculpida vida y poco
es lo que existe de espíritu diseminándose por tu sangre?
Es acaso la fría piedra que adopto en ciertas ocasiones, la cual tiene muchas herederas para verte de nuevo y saber que eres la única madre de estas, como esas poesías que escribí con mis propias lágrimas de un rio donde no sabíamos nadar pero nos llevamos por la corriente de esa selva experimental.
Déjame llevarte un poco atrás cuando cometimos errores los dos, recuerdas esa fría habitación donde estábamos sentados ante la fría sociedad y mi mano con convicciones de arriero sembraba semillas de paciencia para amarte frustradamente por calmar tu ansia tierra que daba frutos pero no los miraba ni me los imaginaba, tu ansia enojada de callarme y gritarme firmemente todas las causas de tu huelga de hambre en mi corazón, ¿lo recuerdas?
Te seré un poco generoso de memoria aunque la mía no sea generosa conmigo mismo, fue una cosecha de hace 3 años, me acuerdo todavía lo ebrio que estaba, caminando por las calles limeñas esperando el alba del primer día de la nueva década llorando en las venas y destruyendo las neuronas de mi corta vida, me aleje de ti por primera vez como me aleje a la misma vez de mis sentimientos capitales. Me conto la brisa que te acompañaba que también estabas triste, triste como yo, como lloro en este momento entre penumbras.
Es difícil recordar tantos momentos con diversas personas, pero me acuerdo de los lugares donde te conocí y el olor que brota de tu pelo, el mejor olor del pasado encerrado en una persona que regresa al presente cuando desea aparecer en mi contexto solitario.
Es acaso la fría piedra que adopto en ciertas ocasiones, la cual tiene muchas herederas para verte de nuevo y saber que eres la única madre de estas, como esas poesías que escribí con mis propias lágrimas de un rio donde no sabíamos nadar pero nos llevamos por la corriente de esa selva experimental.
Déjame llevarte un poco atrás cuando cometimos errores los dos, recuerdas esa fría habitación donde estábamos sentados ante la fría sociedad y mi mano con convicciones de arriero sembraba semillas de paciencia para amarte frustradamente por calmar tu ansia tierra que daba frutos pero no los miraba ni me los imaginaba, tu ansia enojada de callarme y gritarme firmemente todas las causas de tu huelga de hambre en mi corazón, ¿lo recuerdas?
Te seré un poco generoso de memoria aunque la mía no sea generosa conmigo mismo, fue una cosecha de hace 3 años, me acuerdo todavía lo ebrio que estaba, caminando por las calles limeñas esperando el alba del primer día de la nueva década llorando en las venas y destruyendo las neuronas de mi corta vida, me aleje de ti por primera vez como me aleje a la misma vez de mis sentimientos capitales. Me conto la brisa que te acompañaba que también estabas triste, triste como yo, como lloro en este momento entre penumbras.
Es difícil recordar tantos momentos con diversas personas, pero me acuerdo de los lugares donde te conocí y el olor que brota de tu pelo, el mejor olor del pasado encerrado en una persona que regresa al presente cuando desea aparecer en mi contexto solitario.
Es verdad yo tuve la culpa en ciertas ocasiones, es mi fría mente
la que me ha vuelto así, sentirte y quererte pero actuando como si no te
quisiera es la rutina de esta alma sin agallas para tenerte entre mis brazos,
mi actitud guevarista me incita a luchar por ideales utópicos y mi realidad
critica me incita a lograr éxitos, pero no comprendo esta situación, va mas allá
de mi criterio y actitud, es penoso tal vez y lo sé pero que te puedo decir,
eres esa etapa que no se si está a punto de irse o permanecer eternamente en mi
alma sin tocar ni traspasar mi cuerpo. ¿Sientes el frio, la desnutrición
sentimental que llevo, la escasez de agosto?
Tomare tal vez por ti, por la frase de los buenos tiempos de no separarnos en los de amistad, mutados en romanticismo y reencarnados en una utopía, recordar esos llantos que nunca debieron pasar que fueron imprudentes en la ocasión, porque uno llora en el alma lo que se siente por dentro. Perdóname e ignórame para siempre, la del pelo negro y la piel blanca con actitudes siempre conflictivas conmigo, como yo contigo que hacían del ambiente único y exclusivo para nosotros dos. Me imagino que lo que digo es estúpido y creado por mí, verdaderamente no sé si lo que sucedió existió y si un domingo nos encontramos por una calle después de terminar una guerra civil, pero si es que esto es una mentira imagínatela como tal y si es la verdad, pues no se qué estrategias se ejecutan solo te digo que te sigo queriendo no como hace 3 años pero tal con ese fervor que me caracterizaba en las aulas, sino con esa evolución del ser humano que va aprendiendo y recogiendo piedras del camino.
Tomare tal vez por ti, por la frase de los buenos tiempos de no separarnos en los de amistad, mutados en romanticismo y reencarnados en una utopía, recordar esos llantos que nunca debieron pasar que fueron imprudentes en la ocasión, porque uno llora en el alma lo que se siente por dentro. Perdóname e ignórame para siempre, la del pelo negro y la piel blanca con actitudes siempre conflictivas conmigo, como yo contigo que hacían del ambiente único y exclusivo para nosotros dos. Me imagino que lo que digo es estúpido y creado por mí, verdaderamente no sé si lo que sucedió existió y si un domingo nos encontramos por una calle después de terminar una guerra civil, pero si es que esto es una mentira imagínatela como tal y si es la verdad, pues no se qué estrategias se ejecutan solo te digo que te sigo queriendo no como hace 3 años pero tal con ese fervor que me caracterizaba en las aulas, sino con esa evolución del ser humano que va aprendiendo y recogiendo piedras del camino.
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